Esta mañana me leí La mala puta. Réquiem por la literatura española. La parte del león la escribe Dalmau; el mallorquín Piña pone unas deslavazadas acotaciones finales desordenadas. Mi recuerdo de Dalmau, al hilo de la lectura de sus biografías de los Goytisolo y Gil de Biedma, era de un gacetillero morboso, corto de entendederas, escabroso y ayuno de ideas. Leías su panfleto sobre Biedma y no inferías una sola idea de por qué es uno de los mayores poetas del siglo XX español, y en cambio te volvías un erudito en chismes de hostias con amantes, en sabores y consistencias de lefas. Al leer esta especie de ditirambo negativo contra autores, agentes, críticos, et caetera, se subraya la misma impresión; ayuno de pensamiento, de diagnosis, de esquema y plan razonado de ataque, de calidades en las certezas y dudas, y mucha presencia de rebuznos, coces y muestras de puertas gayola un si es no es vergonzosas. Lágrimas de cocodrilo de burricie desarticulada, y un irritante colegueo coloquial como de anciano rockero añejo y medio gagá. No puedes sostener la tesis que la literatura moderna española es una mierda -tesis que, por cierto, también creo- con argumentos de detritus y menciones ad hominem, con una crónica de baratura que demuestra precisamente esa bajura y falta de valor. Esto más que un ensayo es un exabrupto de magazine para verduleras. Made in Dalmau.
Lectura de Miguel Dalmau y Román Piña.
Publicado por christiansanz71
Orate, orante y diletante. Burgués hacendado, aldeano ilustre. Pienso bien, escribo regular -desearía que con distinción-, y hablo mal. Solitario compulsivo. Lector omnímodo, omnímodo, diagnosticado de bibliopatía. Apocalíptico y antimoderno. Debemos apartar el chusmerío de nosotros y buscar el lujo de la mente, también la bondad. Voltaire: “La terre est couverte de gens qui ne méritent pas qu´on leur parle (la tierra está llena gente a quien no merece la pena dirigirle la palabra) “Por desgracia la expresión coquin méprisable , granuja despreciable, resulta aplicable a un número terrible de personas de este mundo” Schopenhauer. “Nec vixet male qui natus moriensque fefellit” Horacio, “No se da mala vida quien de nacimiento a muerte pasa desapercibido”. Mejor no podría ser dicho. O bien igual Ovidio, “Bene qui latuit, bene vixit”, “Quien bien se esconde, bien se da”. Solo y oculto se está mejor en esta hodierna e híspida civilización donde la publicidad está por encima del logro, la revelación por encima del comedimiento, la sinceridad por encima de la decencia, el victimismo por encima de la responsabilidad, la confrontación en lugar de la cortesía, la psicología sustituyendo la moralidad. Para acabar ya, y como divisa o lema: "Litteras ese solas quae homines ese vere convincat", las letras son la única prueba de que se es verdaderamente hombre. Ver todas las entradas de christiansanz71