Soy conservador, en el sentido que creo que la tradición -la traditio– funciona como un filtro darwiniano seleccionando lo mejor, no necesariamente lo más adaptativo, sino seleccionando la Gran Conversación, la Conversación de lo que las mejores mentes han pensado y dicho, contemplado y descrito, esculpido y musicado, teologado y filosofado. Existe una criba de los grandes respecto de lo grande donde queda -como arena al fondo de la clepsidra- lo excelso de la Conversación Filosófica, de la Teológica, de la Conversación Musical, de la Conservación Científica, etcétera. La Conversación o tradición es la asunción de lo decantado como eterno e imperecedero por el tiempo. De las obras veteadas en grumos inmortales y eternos de belleza, de verdad y de bondad. Lo actual genera también ideas novedosas pero para pasar a la tradición deben tener las mismas calidades y quilates como aquello con que se debe engarzar. Hay mucha paparrucha moderna, mucho mentecato, muchos mamarrachos desvertebrados e inanes (paséense por ARCO o un museo de arte contemporáneo) Uno conserva lo excelso que ha sido porque con esos elementos se puede fundamentar bien el ser e incrementar sanamente la personalidad. El tiempo también arrastra hierbajos y malas yerbas, pero se perciben por contraste con gran acuidad, con distinción y claridad cartesiana. La paja y la morralla y la alfalfa de los tiempos modernos no permiten el contraste, ergo, muchos los toman como sucedáneos de rosas y trigales geométricos, como nubes definitivas. Soy conservador porque quiero ser lúcido, porque quiero un yo elaborado sin mentiras, pegado a la historia que me explica y que también es mi esencia; soy conservador porque amo el pasado y temo al futuro, porque temo cualquier futuro no devenido ya en marmóreo y memorable pasado.
¿Por qué soy conservador?
Publicado por christiansanz71
Orate, orante y diletante. Burgués hacendado, aldeano ilustre. Pienso bien, escribo regular -desearía que con distinción-, y hablo mal. Solitario compulsivo. Lector omnímodo, omnímodo, diagnosticado de bibliopatía. Apocalíptico y antimoderno. Debemos apartar el chusmerío de nosotros y buscar el lujo de la mente, también la bondad. Voltaire: “La terre est couverte de gens qui ne méritent pas qu´on leur parle (la tierra está llena gente a quien no merece la pena dirigirle la palabra) “Por desgracia la expresión coquin méprisable , granuja despreciable, resulta aplicable a un número terrible de personas de este mundo” Schopenhauer. “Nec vixet male qui natus moriensque fefellit” Horacio, “No se da mala vida quien de nacimiento a muerte pasa desapercibido”. Mejor no podría ser dicho. O bien igual Ovidio, “Bene qui latuit, bene vixit”, “Quien bien se esconde, bien se da”. Solo y oculto se está mejor en esta hodierna e híspida civilización donde la publicidad está por encima del logro, la revelación por encima del comedimiento, la sinceridad por encima de la decencia, el victimismo por encima de la responsabilidad, la confrontación en lugar de la cortesía, la psicología sustituyendo la moralidad. Para acabar ya, y como divisa o lema: "Litteras ese solas quae homines ese vere convincat", las letras son la única prueba de que se es verdaderamente hombre. Ver todas las entradas de christiansanz71